Santiago de Cuba, 16 mar.— Con “Juan Almeida el compositor”, exposición de vinilos patrimoniales cubanos que se inaugura este viernes en la Casa Dranguet, Santiago de Cuba rinde homenaje al Comandante de la Revolución quien, además de líder revolucionario, tuvo una prolífera, importante e impresionante labor como compositor musical.
A él se le atribuyen más de 300 temas entre los que se destacan La Lupe, Este camino largo, Vuelve pronto, Mejor concluir, Mejor diciembre, Dame un traguito y Déjala que baile sola, obras que le han merecido un lugar en el panorama musical cubano, y con especial cariño en el pueblo santiaguero.
Durante décadas, sus composiciones han sido interpretadas por un sinfín de artistas como Beatriz Márquez, Farah María, Omara Portuondo, Elena Burke, Héctor Téllez y muchos más, validando así no solo la calidad de Almeida como artista, sino su popularidad entre las personas que consumen este arte.
Justamente el sentido de la exposición “Juan Almeida el compositor” es primero reflejar la obra del Comandante de la Revolución en unos 20 acetatos dedicados exclusivamente a sus temas; y en segundo momento, mostrar fonogramas de artistas o agrupaciones que insertaron en sus compilaciones algunos de sus temas.
Los vinilos que integran la muestra pertenecen a disqueras cubanas y extranjeras, entre las nacionales algunas que dejaron de existir, como son la Imprenta Nacional Cubana, Areito, Siboney, Puchito, Gema, entre otras, y como curiosidad, está un fonograma grabado en Bulgaria y contiene toda la información en búlgaro.
Con “Juan Almeida el compositor”, la Casa Dranguet –perteneciente a la Oficina del Conservador de la Ciudad (OCC) de Santiago de Cuba– se inserta en el ambiente de jolgorio de la urbe, al celebrarse la edición 56 del Festival del la Trova “Pepe Sánchez”, y es, además, la tercera exposición dedicada a los vinilos patrimoniales, después de “La Trova en Vinilo” (2016) y “Matamoros en Vinilo” (2017).
Los discos empleados en estas exposiciones pertenecen a la colección "SonEros", del Arq. Omar López, director de la OCC, quien ha tenido para bien en los últimos años arrojar luz sobre el tema de los vinilos patrimoniales y ha empleado estas muestras como una manera de crear conciencia sobre su importancia y necesidad de preservación.
Durante los días del Festival de la Trova, la propia Casa Dranguet, como años anteriores, abre su acogedor patio para que los jóvenes artistas muestres su arte y hagan las famosas descargas que caracterizan al género, acunado precisamente en Santiago de Cuba.
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