Plaza de la revolución

Plaza de la revolución
Plaza de la revolución

martes, 26 de diciembre de 2017

La Huelga azucarera de 1955


Por Armando Fernández Martí

Santiago de Cuba, 26 dic.— El 26 de diciembre de 1955, hace hoy 62 años, una huelga obrera paralizó el sector azucarero, el más importante de la economía cubana de entonces, cuyos trabajadores reclamaban el pago del diferencial azucarero, logro conquistado por Jesús Menéndez desde la zafra de 1946, enfrentado de tú a tú a los intereses norteamericanos que tenían bajo su control las exportaciones de azúcar desde Cuba.

¿Qué era el diferencial azucarero? Explicado de la forma mas sencilla, era la diferencia entre el precio real del azúcar en el mercado mundial y el precio que pagaba Estados Unidos por el crudo que exportaba desde la isla, por lo que el país dejaba percibir millonarias sumas.

Percatado de tal situación el Sindicato Nacional Azucarero liderado por Jesús Menéndez Larrondo, exigió al gobierno del presidente Ramón Grau San Martín, que en las negociaciones con Estados Unidos para la venta del azúcar de la zafra 1946-1947 se incluyera el pago de esa diferencia entre un precio y otro, para ser repartido entre los trabajadores del sector.

El propio Menéndez viajó a Washington para reclamar ese derecho de los 400 MIL obreros azucareros cubanos de recibir ese pago, enarbolando la consigna “Con el diferencial en la punta de la mocha” o por el contrario, no habría zafra, viéndose obligado Estados Unidos a corresponder a la demanda de los trabajadores del sector.

Para que se tenga una idea de lo perjudicial que era para Cuba la exportación de azúcar a Estados Unidos, digamos que este pagaba la libra del crudo a poco mas de tres centavos y medio, mientras que el valor en el mercado mundial era de siete centavos. Por la diferencia entre uno y otro precio la zafra de 1946 representó 36 MILLONES de dólares de diferencia, 29 de los cuales fueron repartidos entre los obreros y el resto se dedicó a obras sociales. La zafra posterior fue superior por lo que la ganancia resultó mayor para los trabajadores.

Además del pago del diferencial el Sindicato Azucarero con Jesús Menéndez al frente obtuvo mejoras tales como el retiro obrero, el pago de las horas extras, mejora de la higiene en bateyes y colonias, entre otras reivindicaciones que se reglamentaron y establecieron en el sector a partir de entonces.

Para Estados Unidos y sus intereses y para la oligarquía nacional, Jesús Menéndez, el negro comunista como le llamaban, era demasiado peligroso y por eso Washington ordenó su eliminación, siendo asesinado en Manzanillo, el 22 de enero de 1948 por un esbirro del régimen.

Aun así, nadie pudo arrebatarles a los azucareros cubanos esos logros y cuando el régimen de Fulgencio Batista pretendió hacerlo en 1955 recibió como respuesta la paralización total de la industria azucarera, un día como hoy, hace 62 años.

Proyecto Suma tu Gota, sus beneficios en 2017

Por Adis López González

Santiago de Cuba, 26 dic.— El Proyecto “Suma tu gota” constituye una importante iniciativa de enfrentamiento a la sequía que afecta a la provincia de Santiago de Cuba. Involucra a varios sectores del gobierno local, dado su carácter multisectorial, que pretende promover el uso eficiente del agua para la sostenibilidad de la seguridad alimentaria y nutricional de grupos vulnerables.

EL Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la UNICEF, el Programa Mundial de Alimentos y la cooperación española, mediante el Fondo para los Objetivos de Desarrollo Sostenible, junto al gobierno e instituciones locales de Santiago de Cuba ayudan a adoptar diversas medidas para el aumento de las capacidades de reserva, a través de financiamiento internacional.

Cuando se inició la entrega gratuita de tanques para ser utilizados como reservorios para agua en el Consejo Popular Haydeé Santamaría, se pretendía favorecer al treinta por ciento de la población del reparto. Pero dada la cantidad donada mediante el Proyecto “Suma tu gota” ahora la cifra asciende al ochenta por ciento de los vecinos del reparto, que equivale a unas treinta y dos mil personas. Se incluyen también, instituciones locales del Centro Urbano Abel Santamaría.

Reducir las enfermedades de origen hídrico y de transmisión por vectores a través de la mejora de las capacidades de almacenamiento de agua y la promoción de higiene, en la población más vulnerable de la ciudad de Santiago de Cuba es más que una intención. De ahí que, además de los nueve mil tanques donados, se favorezca a otras familias necesitadas.

Aunque aún existe un déficit de 250 mil tanques, esta es una de las iniciativas que más directamente ha impactado en la población. El Semiinternado Raúl Gómez García ahora posee en el comedor óptimas condiciones para brindar servicios y la escuela Gildo Miguel Fleitas López agradece al programa veinte nueve reservorios.

El área de salud del Centro Urbano Abel Santamaría consta de 40 701 habitantes. Actualmente, se ha completado la distribución de tanques de agua y kits básicos de higiene a 9820 familias de este centro urbano y barrios periféricos, que equivale al 73 porciento del total de familias y a 30 525  habitantes con capacidades para el almacenamiento de agua segura.

Además de los beneficios directos a la población en sus respectivos hogares, se mejoraron las capacidades de almacenamiento de agua segura a cuarenta y tres centros de salud: Policlínicos, Consultorios Médicos de la Familia, Servicio de Atención a la Familia, Farmacias y Ópticas.

Diversos grupos etáreos se favorecen, desde los más pequeños hasta los adultos mayores, incluyendo, además, una perspectiva de género en el tratamiento a cada tema. Sesenta y ocho centros educacionales de diversas enseñanzas muestran positivos cambios, entre ellos, círculos infantiles, primarias, secundarias y preuniversitarios.

Dos mil quinientos treintra y tres niñas y dos mil cuatrocientos veintinueve niños mejoran sus calidad de vida, tanto en la comunidad como en los centros escolares. El universo juvenil, entre 19 y 24 años fueron beneficiados con la entrega de kits básicos de higiene y reservorios para el almacenamiento de agua segura.

Este programa conjunto ha propiciado el fortalecimiento de alianzas con el gobierno local, sectores como la salud, educación, organizaciones de masas, líderes comunitarios y el centro de gestión de riesgo, quienes participan activamente, desde sus perspectivas.

Se implementa la estrategia de comunicación “Agua siempre segura” que refuerza mensajes hacia el cambio de comportamiento en función del adecuado desarrollo, logrando que las familias, niñas, niños, adolescentes, profesores, se conviertan en agentes de cambio para el cuidado y uso del agua, que es decir, cuidar de la salud.

Se aprovecharon las capacidades y aptitudes de la población de diversas edades y sectores sociales, a través de acciones de capacitación en talleres, actividades en centros escolares, y hospitalarios, se crearon círculos de interés, promoviendo conocimientos sobre agua segura, su uso eficiente, manipulación higiénica de los alimentos, lavado de las manos y protección contra vectores a cerca 277 participantes.

Como parte de la gestión de conocimientos, se estrecharon vínculos con la Universidad de Oriente, en las especialidades de Ingeniería Hidráulica y Comunicación Social. Igualmente, con los medios de prensa televisivo y radial, con significativas acciones de comunicación  que propiciaron visibilizar las acciones del programa.

Aunque cada persona cuenta, los niñas, las niños, jóvenes y adolescentes, constituyen integrantes imprescindibles de estas acciones, pues en ellos están el presente y el futuro. Por eso, el quehacer de UNICEF resulta indispensable en el acompañamiento a los sectores vulnerables. Ante la sequía, aprender actitudes consecuentes preserva nuestra salud y la de los demás, que equivale a decir: LA VIDA.