Seis meses y 25 días después de caer el último out en el José Ramón Cepero, el béisbol regresa: mañana, a partir de las 2:00 p.m., Pinar del Río y Ciego de Ávila, campeón y subtitular de la pasada contienda, serán los encargados de animar la primera jornada de la 51 Serie Nacional, con el Capitán San Luis como escenario.
La ceremonia oficial de apertura tendrá aproximadamente 30 minutos de duración y 10 minutos más tarde saldrán a la grama los integrantes del Tsunami verde y los Tigres avileños, dos de los equipos considerados favoritos para entrar otra vez en la postemporada.
El último partido entre ambos tuvo lugar el pasado 2 de mayo y en él sostuvieron un duelo los dos abridores de mañana, los derechos Yosvani Torres y Vladimir García. El primero regaló a sus parciales una joya de pitcheo, manteniéndose todo el tiempo en el box diseminando 8 jits y una carrera mientras repartía ocho ponches y regalaba un solitario pase gratis. Vladimir se presentó menos efectivo y toleró 10 imparables, uno de ellos cuadrangular del camarero David Castillo que sentenció el choque.
Recordemos las alineaciones de ese juego final del play off. Pinar alineó con Castillo en la intermedia, Lorenzo Quintana en la receptoría, Donal Duarte (3B), Wiliam Saavedra, cuarto bate y jardinero izquierdo, Norlis Concepción a cargo de la inicial, Mijaín Rivera en la pradera derecha, Luis Alberto Valdés en el campo corto, y Reinier León custodiando el bosque central.
Ciego tuvo a Raúl González como antesalista, Yorbis Borroto como torpedero, Rusney Castillo, el flamante campeón de bateo de la pasada Copa del Mundo, se desempeñó en el derecho, y el veterano Yoelvis Fiss fue el cuarto bate y jardinero central. Un jugador que arriba a su Serie número 20, Isaac Martínez, ocupó el puesto de designado, seguido por Mario Vega (2B), Yorelvis Charles (1B), Lisdey Díaz (R) y Abdel Civil defendiendo el jardín izquierdo.
Otra novedad en esta 51 Serie es la reglamentación del pitcheo, más flexible, la cual se mantendrá en los play off. Con 40 lanzamientos un serpentinero puede volver a trabajar al día siguiente, con 70 podrá retornar al segundo día y si llega al límite de los 120 tendrá que esperar cuatro y no cinco como era hasta el año pasado. Sin duda, esto le proporciona un mayor margen a los mentores a la hora de rotar a sus hombres.
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